Articulaciones

Artrem Doble Potencia Sulfato de Glucosamina Sulfato de Coindoitrina MSM (metilsulfonilmetano) Colageno + Bioflavinoides

Potente mezcla de nutrientes para fortalecer las articulaciones. Artrem®
Combina los tres principales componentes estructurales que se encuentran en los productos para las articulaciones: glucosamina, condroitina y MSM, con el respaldo del colágeno.

Esta fórmula de gran calidad ofrece 1,500 mg de sulfato de glucosamina que contribuye con el crecimiento y fortalecimiento de los cartílagos, la lubricación de las articulaciones y ayuda a calmar el estrés ocasional producido por el ejercicio o la actividad física.

Investigaciones clínicas en la osteoartritis.

El sulfato de glucosamina se utilizó inicialmente en el tratamiento de enfermedades articulares degenerativas.

Las experiencias comparativas de la droga con agentes antiinflamatorios no esteroides revelaron que la reducción del dolor por tiempo prolongado fue superior en los pacientes tratados con el sulfato de glucosamina. Los síntomas como dolor articular, hipersensibilidad articular y tumefacción suelen mejorar entre las 6 y 8 semanas de administración oral.
Para la mayoría de los individuos, es razonable esperar reducciones de los síntomas en el rango comprendido entre el 50% y 70%. Las mejorías por lo general se mantienen entre las 6 y 12 semanas posteriores a la suspensión de la terapia. En la artritis de rodilla, la evidencia indica que aproximadamente el 60% de los afectados experimentará una respuesta entre buena y excelente, con un 35% adicional que presentará beneficios moderados. La evidencia preliminar sugiere que los individuos con artritis de hombro o de codo responden bien al sulfato de glucosamina (cerca del 75% de las respuestas es considerada buena). La población con artritis poliarticular y de cadera presenta las menores tasas de respuesta, del 43% y 49%, respectivamente

Una investigación llevada a cabo con sulfato de glucosamina durante tres años sobre un número importante de pacientes reveló que la droga no fue sólo capaz de controlar el dolor, sino que además frenaba el proceso de destrucción de los tejidos que provocaba ese dolor, teniendo menores efectos secundarios que los tratamientos utilizados en la actualidad.

La glucosamina y el sulfato de condroitina ayudan a combatir la osteartritis.

Los ensayos realizados con el sulfato de glucosamina, una sustancia natural extraída de ciertos pescados y mariscos, confirman que resulta eficaz para ayudar a combatir la osteoartritis, una patología que se caracteriza por presentar un progresivo desgaste del cartílago de las articulaciones, proceso que provoca dolor progresivo.

Esta sustancia no sólo ayuda a mejorar el funcionamiento articular y aliviar el dolor, también favorece la prevención del deterioro del cartílago. Pero también se puede hablar del sulfato de condroitina, otra sustancia del grupo de “protectores de las articulaciones”, como el sulfato de glucosamina.
Un artículo publicado en Osteoarthritis and Cartilage, realizado por un grupo de científicos suizos, describe como el sulfato de condroitina favorece la mejora de la sintomatología de la osteoartritis tras ofrecer a los pacientes dos sesiones de tres meses de duración cada una con esta sustancia, y tras un año de observación.

Menos dolor, más funcionalidad articular.

Los participantes en este estudio fueron aleatorizados en dos grupos, uno que recibió sulfato de condroitina y el otro placebo. En base al test de Lequesne para controlar la intensidad del dolor y la funcionalidad de la rodilla, los investigadores observaron, tras un año de seguimiento, una mejora significativa en el 36% de los pacientes que recibieron sulfato de condroitina, comparado con placebo.

Los objetivos secundarios del estudio, que valoraron la capacidad de andar o el consumo de paracetamol, también arrojaron resultados similares. En este sentido, cabe señalar que las pruebas por la imagen realizadas a los pacientes confirmaron que en el grupo placebo no se frenaba la erosión articular, mientras que en el grupo que recibió sulfato de condroitina no se registraba una pérdida significativa de cartílago articular.

Cómo ayuda el MSM (Metilsulfonilmetano) en mis articulaciones?

Pruebas clínicas con humanos sugieren beneficios particularmente con osteoartritis o artrosis, con la Rinitis alérgica (inflamación del revestimiento mucoso de la nariz), con la cistitis intersticial (condición que causa molestias o dolor en la vejiga y el abdomen) y con los ronquidos.